Cuando hablamos de violencia, inmediatamente pensamos en golpes y maltrato, ya sea hacia una mujer, niño o un hombre, lo cierto es que aunque desde tiempos antiguos la violencia se encuentra más relacionada con la mujer como víctima, también hay hombres que llegan a verse envueltos en este tipo de agresiones. De igual manera, cabe destacar que la violencia no siempre es física, sino que también existe a nivel psicológico.
A continuación, hablaremos de los principales signos de violencia psicológica que pueden identificarse en una persona.
- Irritabilidad
Una persona que es agredida psicológicamente de manera constante, puede sentirse irritable la mayor parte del tiempo, inclusive mantenerse a la defensiva hacía las ideas y comentarios de otras personas aunque estas no tengan ninguna mala intención ni sean quienes causan el daño.
- Temor
El temor a diferentes horas del día e inclusive en todo momento es un signo común de este tipo de violencia, especialmente se acentúa cuando se acerca la hora de llegada o de verse con la persona que inflige el daño emocional.
- Inseguridad
Una persona a la que frecuentemente se le dicen palabras hirientes causando un daño emocional profundo, normalmente se sentirá insegura de muchas cosas, desde llevar a cabo tareas simples y cotidianas, hasta atreverse a emprender un nuevo proyecto. De hecho, en muchas ocasiones en esto se basa el objetivo del victimario.
- Autoestima baja
Al igual que sucede con la inseguridad, quienes son violentados psicológicamente suelen tener una idea menospreciada de sí mismos, tanto de su imagen como de sus capacidades, lo que los lleva a dejar de cuidar de su persona, desde cuidados básicos como la higiene y presentación, hasta otros más graves como dejar de cuidar su salud.
- Ansiedad
Debido a la situación de estrés y violencia en la que estas personas se encuentran, se pueden experimentar ataques de ansiedad, que a su vez, llegan a hacerles pensar que tienen determinados problemas de salud.
- Apatía
Cuando alguien se ve envuelto en una situación de violencia, ya sea física o psicológica, es normal que empiece a perder el interés, tanto por las cosas de la vida cotidiana, como por aquellas que le interesaban.
Reconocer estas señales en cualquier persona cercana, debe ser razón suficiente para tratar de saber si todo va bien con el tipo de relaciones que tiene, ya que este tipo de violencia, si bien se da con mayor frecuencia en la pareja, también puede suscitarse en el entorno familiar, laboral o escolar.
Si estas señales se reconocen en uno mismo, lo mejor es hacerles frente y no ignorarlas, solo de esta manera se puede tener el valor para poner fin a la relación que está ocasionando el daño.
El texto aquí plasmado es meramente informativo, cuando se tratan cuestiones de salud, es indispensable buscar atención médica profesional.