Un nuevo año ha empezado, y como es costumbre, siempre deseamos empezarlo con el pie derecho. Cada día que tenemos la bendición de estar vivos, es sin duda una nueva oportunidad para actuar de manera correcta, ayudar a otros y trabajar por nuestros sueños.
Aprovechando que estamos arrancando un nuevo ciclo, queremos hablar sobre algunos hábitos que pueden llevarse a cabo para mejorar el rumbo de nuestros días.
- Disfrutar el ahora
Solemos llenar nuestra mente con pensamientos pasados y preocupaciones futuras, cuando la realidad es que no sabemos si despertaremos mañana, pero quizás sí y tal vez estemos en este mundo hasta ser viejos. Definitivamente no vale la pena desperdiciar el tiempo que se tiene (poco o mucho) en estos pensamientos. Aprender a disfrutar cada momento de nuestras vidas y estar realmente presentes es la mejor forma de aprovechar nuestro tiempo.
- Entender que no tenemos el control de todo
Es importante mentalizarnos de que no todo lo que sucede alrededor se encuentra bajo nuestro control. Tratar de mantener el control de lo que nos rodea en todo momento puede ser desgastante y frustrante si no se consigue, lo mejor es aprender a soltar y encargarse de una tarea a la vez. Esto incluye que no podremos tener a todos contentos con nuestros actos y decisiones.
- Si hoy no se pudo dejarlo para mañana
A veces el día no nos da para todo lo que quisiéramos, las tareas y proyectos se van acumulando y lejos de avanzar nos sumimos en la desesperación y el estrés. Recordemos que lo importante es no dejar de avanzar sin importar a que paso lo hagamos. Sí en un día no se pudo terminar todo lo que se tenía planeado, podemos pasarlo para el siguiente sin que se vuelva un conflicto. Una recomendación relevante en este punto es priorizar para no dejar de lado aquellas cosas que sí o sí necesitan atención.
- Agradecer
Quizás no estemos pasando el mejor momento de nuestras vidas, o quizás sí, esto seguramente es diferente para cada persona, lo cierto es que todos hemos tenido y seguiremos teniendo tiempos buenos y malos. A pesar de esto, ciertamente hay muchas cosas por las que sentirse agradecido cada día, el simple hecho de abrir los ojos cada mañana es una de ellas.
Es cierto que estamos pasando tiempos difíciles, hemos tenido un cierre e inicio de año fuera de lo común, pero aún dentro de esto hay cosas positivas que no debemos perder de vista y que nos ayudarán a tener mejores días.